Trasfondo[]
Un rencor, como cualquier herida, sin atención se infecta.
Hun Batz y su hermano gemelo Hun Chuen, llevaban una vida de satisfacción con su abuela. Artistas y músicos, todo lo que crearon era hermoso y encantador, pero le faltaba el talento de su padre para el juego de pelota, Pitz. Convocado a los infiernos, su padre, Hun Hunapu nunca regresó. En cambio, su nueva descendencia, hermanastros a Hun Batz y Hun Chauen, aparecieron. Los Héroes Gemelos eran todo lo que los gemelos originales no eran, fuertes, atléticos e inteligentes. Y fueron muy dotados jugando al Pitz.
Una rivalidad celosa se crea entre los dos pares de gemelos. Cuanto más jugaban a la pelota juntos, Hun Batz y su hermano más derrotados eran. Finalmente, los gemelos originales recurrían a trucos, faltas, tácticas agresivas, y engaños en la salida. Frustrados con estas payasadas, los Héroes Gemelos patearon la pelota contra un árbol, a sabiendas que Hun Batz y su hermano se consideraban excelentes trepadores y podría ir tras ella. Sin embargo, cuánto más alto subían, más alto crecía el árbol, hasta que no pudieron volver a bajar. Satisfechos con su magia hasta el momento, los héroes gemelos desafiaron a Hun Batz y Hun Chuen a utilizar el cinturón como colas con el fin de escapar de la terrible altura. Sin embargo, al hacerlo, se transformaron misteriosamente y de forma humillante en monos.
Aunque los gemelos mono, como se les llama ahora, llegaron a ser adorados como dioses del arte y la música, la animosidad que tienen para los Héroes Gemelos permanece. El tiempo sólo ha agudizado su astucia combinada, que esperan con impaciencia la oportunidad de devolver el golpe. Al igual que cualquier herida, su rencor ha empeorado, y lo que antes era una rivalidad fraternal se ha convertido en un juego mucho más mortífero.