Trasfondo[]
Los Kappa son criaturas malvadas. Se quedan justo debajo de la superficie de ríos y lagos, esperando a que los mortales prueben el agua antes de arrebatar y ahogar su carnosa cena. Si se tiene en cuenta únicamente su apariencia juvenil y su sentido del humor, podrían ser tomados por traviesos hombres-tortuga, casi juguetones en un sentido rudo, pero son peligrosamente fuertes y despiadados cuando sumergen a su presa. El Rey entre estos monstruos es Kuzenbo; más grande, fuerte y astuto que el resto, pero igual de infantil.
Kuzenbo guió sus 9 mil seguidores Kappa a Japón, donde acosaron aldeas con ríos y barcos de pezca, usando su fuerza antinatural para hundir a los mortales. Se volvieron tan inteligentes, tan hambrientos, que los ejércitos japoneses marcharon para luchar contra ellos, pero no fueron rivales. A medida que la hendidura, como un tazón, en la cabeza del Kappa se llena de agua, se vuelve imposiblemente fuerte, mucho más fuerte que un mortal. Sin embargo, atado por su extraño sentido del honor, un Kappa debe inclinarse cuando se inclinan ante él, derramando su poder sobre el suelo. Es la única manera conocida de derrotarlo.
Y en las incontables batallas que Kuzenbo a luchado, sólo ha sido derrotado dos veces. Tras su segunda derrota a manos del General Kiyomasa, Kuzenbo se vio obligado a nunca más sembrar la contienda entre hombres y bestias. Un voto que el Rey Kappa ha honrado desde entonces. Los dioses, sin embargo, juegan limpio.